Inician internación de emergencia al obispo emérito Alejandro Goic en Rancagua

El exobispo de Rancagua, entre 2004 y 2018, fue ingresado de urgencia en la Clínica Isamedica de Rancagua, y autoridades de la diócesis hacen un llamado a la oración por su pronta recuperación.

El viernes por la tarde, el monseñor Alejandro Goic, quien desempeñó el cargo de obispo de Rancagua entre 2004 y 2018, fue trasladado de emergencia a la Clínica Isamedica en Rancagua, según informó el Obispado de Rancagua. El religioso, de 85 años, fue puesto bajo vigilancia médica y recibe los cuidados pertinentes. La entidad eclesiástica invitó a toda la comunidad diocesana, así como a las parroquias y fieles, a unirse en oración para solicitar fortaleza y una pronta mejoría para el monseñor en este delicado momento de salud.

Durante la mañana del sábado se comunicó que la evolución del obispo ha sido favorable. Se explicó que, tras una noche estable y reparadora, Goic continúa internado en la misma clínica.

Alejandro Goic ha tenido una larga y destacada trayectoria en la Iglesia chilena. Además de haber dirigido la diócesis de Rancagua, ejerció como presidente de la Conferencia Episcopal entre 2004 y 2010 y se desempeñó como obispo de Osorno de 1994 a 2003. Nacido en Punta Arenas y tío de la exsenadora Carolina Goic, siempre mostró un marcado compromiso con los sectores más vulnerables y la justicia social. En su localidad natal, además de ser párroco, fungió como capellán en la penitenciaría. Durante su gestión como vicario general en Punta Arenas, colaboró en las gestiones para evitar el conflicto del Beagle en 1978. Posteriormente, en su labor como obispo auxiliar de la Arquidiócesis de Concepción, se ganó el apodo de “obispo rojo” por parte del régimen militar, especialmente por su cercanía a las demandas de los mineros de Lota.

En su periodo como obispo de Rancagua, también participó activamente en las negociaciones con trabajadores subcontratados de Codelco, proponiendo la sustitución del sueldo mínimo por un “sueldo ético”. Su salida en 2018 se destacó por la denuncia que presentó ante el Consejo de Prevención de Abusos, en la que imputó a 14 sacerdotes por presuntos abusos sexuales contra menores.

Autor: Roberto Sánchez

Deja tu comentario

Deja tu comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *